Como todos los años, el Espaillat se vistió de Gala para disfrutar de la llegada de un nuevo año 2008 y el goce de la reunión entre hermanos, amigos y vecinos en un barrio que ha sabido mantener la tradición del amor y la amistad.
Los bebedores de Grandes Ligas, como Rudy y Kico , se mantuvieron en el “bullpen” solamente calentando el brazo.
En la fiesta del Espaillat no existia la edad porque tanto niños como viejos disfrutaban al unísono de las comidas y las bebidas.
AVE agradece a los participantes y visitantes el comportamiento ejemplar de todos.
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